Nos encontramos en la siguiente paradoja: disponemos de placas solares baratas con las que poder realizar nuestro kit solar a medida de nuestras necesidades, pero no tenemos la certeza de que no nos vayan a cobrar un impuesto por ello.
El próximo jueves 31 de octubre se debaten y votan en el Pleno del Congreso de los Diputados las enmiendas a la totalidad sobre el proyecto de Ley del Sector Eléctrico (LSE).
Diversas asociaciones han promovido recogida de firmas contra lo que si no se remedia puede ser el primer impuesto al sol de la historia.
Las enmiendas en general van encaminadas a la valorización de un sistema renovable tan desprestigiado por la propuesta de nueva ley. Los puntos más problemáticos son:
- La eliminación del peaje de respaldo. El llamado impuesto al sol.
- La implantación del balance neto con compensación de un año. Sistema implantado en muchos europeos y en EEUU que permite compensar la energía eléctrica producida de más en ciertos momentos, y vertida a la red, por “saldo a favor” de consumo a lo largo de un año.
Hay que apoyar el balance neto porque:
- Porque reduce las emisiones contaminantes, por basarse en energías renovables (solar y minieólica), luchando así contra el cambio climático.
- Porque nos acerca a los objetivos fijados de 20% de nuestro consumo total de energía para 2020 fijados por la unión europea y a los que nos hemos comprometido.
- Porque nos ahorra pago por emisiones de CO2 al evitar que pasemos nuestro cupo.
- Porque favorece un sistema descentralizado, reduciendo las pérdidas de energía por el transporte de la electricidad a través de la red.
- Porque facilita el ahorro y el consumo eficiente de los recursos de que disponemos.
- Porque abarata nuestra factura de importación de combustibles fósiles y nuestra dependencia energética de los países exportadores, factura que asciende a 45.000 millones de euros anuales.
- Porque crea empleo también sostenible; proyectistas, distribuidores, talleres de montaje, instaladores…
Estaremos atentos al devenir de los acontecimientos, pues sabemos cómo funciona nuestro sistema eléctrico y la opacidad que le rodea.
Os animamos a firmar cualquier petición de parada de esta insensatez y a seguir muy de cerca el quehacer de nuestros políticos en este asunto.
